No fue por Covid 19 ni por rendirle homenaje a ls muertos por el coronavirus. El negro con el que ensuciaron la camiseta sagrada de Juan Aurich fue porque desde un comienzo los dirigentes del Ciclón sabían que el equipo no iba a subir.
La derrota 2-1 en suplementario ante Alianza Atlético en el Monumental nos dejó sin el ascenso y el coraje de los muchachos no alcanzó.
El luto no es de ahora tampoco. Desde que César Alva le regaló el club a William Pichling, el color negro nefasto que equivale a deceso, velorio y luto, prevaleció en nuestros colores tradicionales y cual maldición Aurich no solo bajó sino que sigue enclaustrado en la Liga 2, sin chance para subir, condenado a recibir los 100 años de fundación en un torneo de poca monta, ante rivales mediocres igual que la dirigencia que tiene el mando del club.
Todos los años se obsesionaron de ponerle negro al uniforme del Aurich y los fracasos se amontonan como la derrota ante Cienciano hace dos años, y luego la definición con Grau el año pasado. Y ahora la dolorosa caída ante Alianza Atlético en tiempo suplementario.
Se peleó hasta el final pero no se pudo.
La derrota sin embargo, no es casualidad. Es resultado final de una serie de errores que comenzaron con la nominación de Isla como presidente, la contratación de José Soto como entrenador, de armar un equipo a última hora y pese al esfuerzo de los muchachos, no alcanzó porque las cosas se hicieron muy mal en la cabeza del club.
El 2021 será más difícil porque estará Alianza Lima y la televisora que los auspicia hará hasta lo imposible para que suba, con todos los honores, de abuso y obviamente nuestro equipo será solo comparsa en el próximo torneo.
Una pena pero dirigentes que no aman al Ciclón no deberían estar en el club. Por ellos estamos como estamos y es hora de dar paso a la renovación, a buscar otros directivos más capaces que realmente amen al equipo.
El Ciclón empezó más impetuoso, apoderándose del balón y arrinconando a los churres.
Las esperanzas de Alianza Atlético se cifraban en Canela, Perlaza y Lugo, pero empezaron el duelo muy imprecisos.
La verdad, Alianza Atlético no tenía ideas y empezó a naufragar en errores, sin embargo Aurich no aprovechaba las ocasiones y no podía perforar la defensa contraria. Solo Alejandro Ramírez llevaba peligro, extrañando la presencia de Carrillo, ausente en la gran final del certamen de ascenso.
Era obvio que sin un hombre más de ataque era complicado superar la recia defensa contraria y por ello los intentos rojos se diluían constantemente pese al entusiasmo y buenas llegadas que propiciaba Alejandro Ramírez, turnándose en ambas bandas para confundir a los contrarios y tratar de llevar mayor peligro a la puerta defendida por Barrios.
La primera ocasión del partido la tuvo Canela, a los 11', rematando demasiado esquinado.
Aurich llegó a los 15', luego de un buen remate de Ramírez pero Barrios respondió con acierto.
El duelo, luego, empezó a llenarse de imprecisiones, luego que Aurich se contagió de los errores de los sullaneros.
Lugo de manera increíble, se pierde la ocasión para los sullaneros, en el minuto 22, luego de recibirla exacta de Canela, pero su patadón no tuvo dirección, cuando estaba cara a cara con el arquero Ismael Quispe.
Reyes tampoco suerte a los 23', al no conectar un buen centro de canela. El jugador churre pasó de largo.
Aurich se la perdió a los 28' y otra vez Ramírez fue quien careció de buena fortuna. Un buen centro de Tamariz, sobrepasó a los defensores sullaneros, pero Ramírez no la pescó precisa y su balonazo se fue afuera. La tensión seguía haciendo presa de ambos elencos.
Aurich estaba muy bien parado en el bloque defensivo, con Segura convertido en un paredón en la defensa roja donde se estrellaban todos los intentos del equipo rival.
Nuevamente Ramírez la intentó, esta vez a los 35', tras una buena jugada de Luis Cañate. Pero su remate se fue muy arriba, después que la defensa sullanera ya estaban con los pelos de punta por la buena cabalgada aurichista.
Alianza Atlético la intentaba con pelotazo largos a canela pero la defensa roja respondía con acierto.
Segura inquietó a los defensores churres, a los 38', recogiendo bien un tiro de esquina rojo, pero no supo definir.
Ramírez era una pesadilla para los defensores contrarios, haciendo de las suyas y llevando constante peligro a la puerta de Barrios, sin duda junto a Collante y Segura los mejores hombres del Ciclón.
Alejandro Ramírez, para variar, tuvo una buena oportunidad tras un error de salida de Alianza Atlético, en el minuto 43, pero su remate de larga distancia no tuvo la fuerza necesaria.
La defensa de Aurich, bien parada, desesperaba a los atacantes rivales, como Perlaza que prefería rematar al bulto víctima de la desesperación de los contrarios
La primera parte fue de Juan Aurich pero Alejandro Ramírez carecía del acompañamiento necesario en el ataque.
Perlaza, en el complemento, se perdió un gol cantado, a los 50 segundos, solito ante la puerta de Ismael Quispe. Tremendo sofocón para los rojos.
En la réplica se le perdió Cañate, rematando sin dirección cuando pudo reventar el arco de los sullaneros.
Aurich empezó con imprecisiones en el complemento, al parecer, por el cansancio del dramático duelo anterior frente al Unión Huaral.
Gonzales, a los 8', la mandó cerquita de la puerta de Ismael Quispe, asustando a los defensores del Ciclón.
Los nervios fueron en aumento y el temor a fallar se acrecentaba en ambos equipos, propiciando constantes tiros de esquina que ponían a temblar a todo el mundo.
A los 11', un defensa sullanero salvó un gol en la línea tras un buen frentazo de Príncipe.
Reyes se perdió una buena ocasión para Alianza Atlético a los 14', tras una gran corrida de Cristian Vargas pero su remate trabado, se fue afuera.
Un tiro libre de Ranírez a los 17', nadie la alcanzó, salvándose la portería de Alianza Atlético.
El cansancio parecía convertirse en nuevo rival para el Aurich, al cumplirse los 20' finales por lo que los muchachos rojos empezaron a sacar fuerzas de flaqueza.
En el minuto 26 ingresó Kevin Carasa en reemplazo de Príncipe.
Cañate, a los 27', estropeó una buena galopada aurichista, mandando el balón a cualquier lado, sin duda, víctima del cansancio y de los nervios que se apoderó de la gran final del torneo de ascenso.
Un cabezazo de Perlaza a los 30', tras un tiro de esquina, asustó a la defensa roja, pero el balón se fue demasiado alto.
Perlaza nuevamente se la perdió a los 32', cabeceando al poste, tras un tiro libre de Cristian Vargas.
Los dos equipos, a los 40 minutos empezaron a guardar fuerzas para el suplementario.
Otra vez Perlaza la intentó a los 43', pero sin dirección, sin duda, ya cansado sin muchas fuerzas por el exigente torneo de ascenso.
Vargas, a los 45', también la mandó a cualquier lado, desperdiciando una nueva llegada sullanera.
Carasa a los 46', perdió en el mando a mano con Barrios, cuando entraba con muchas posibilidades al área churre.
El duelo se tornó lento, pero con mucho temor en ambas escuadras para no cometer ningún error.
Así, el lance culminó 0-0 en su tiempo reglamentario, obligando a jugarse dos suplementarios de quince minutos para definir al campeón del certamen de ascenso.
Ambos elencos iniciaron el alargue visiblemente cansados, pero poniendo el corazón en la cancha para conseguir el ansiado boleto para la Liga 1, tras un reñido duelo en sus 90'.
Vargas, a los 2' del primer suplementario, se la perdió, estando cerca de la valla de Quispe pero su balonazo se fue afuera.
Cañate, lesionado, no pudo resistir más y dejó la cancha tras un heroico partido, soportando un tirón en un muslo a los 4'. Ingresó León.
Aurich sacaba fuerzas de donde sea y continuaba bien parado en la cancha, pese al cansancio y todo el gran esfuerzo realizado en el torneo de ascenso.
Ramírez, la gran figura del Ciclón, ya estaba sin fuerzas, jugando con el corazón ante un rival que parecía más entero.
José Soto hizo ingresar, a los 13', a Darwin Meléndez por Castro, para darle fuerza al equipo.
Así culminó el primer suplementario, sin que se mueva el marcador.
Córdova rompió el empate a los 3' del segundo suplementario, al aprovechar una pelotera tras un tiro de esquina de Lugo.
Aurich se fue con todo al ataque y Alono Tamariz remató débil a las manos de Barrios a los 4'.
En el minuto 6', le cobraron penal a Juan Aurich. Collante fauleó en el área a Saffadi.
Lugo se encargó de anotar.
El Ciclón era víctima del cansancio, de las ausencias de Carrillo y Trejo.
Aurich se fue con todo al ataque en busca de aminorar el marcador.
Alianza Atlético empezó hacer tiempo, mientras que el Ciclón sumaba al cansancio, el reloj como un nuevo rival que tenía desesperado al equipo de José Soto.
Franco León con un golazo de tiro libre, consiguió el descuento. Aurich seguía vivo.
Saffadi se perdió el tercero a los 16' cuando estaba solo ante Quispe.
Ni el Covid 19, ni los muertos por la pandemia. El luto con que mancharon la camiseta del Aurich fue porque nuestro club no iba a subir pese al coraje de los muchachos y ahora toca esperar, quizás muchos y muchos años para que otra vez lo tengamos de vuelta en Primera División.
Dirigió bien Joel Alarcón.
AURICH (1):I. Quispe; B. Otiniano, A. Tamariz (TA), K. López (TA) y J. Segura; G. Collante, F. Castro, L. Cañate (F. León) y K. Príncipe (K. Carasa); A. Ramírez (TA) y L. Carrillo. DT: J. Soto.
ALIANZA ATLETICO (2): I. Barrios; M. Ganoza (P. Diez Canseco) J. Barreda, D. Gonzales y B. García; C. Correa, K. Lugo y F. Aivar; O. Reyes (TA) (D. Saffadi), J. Canela (C. Vargas)y V. Perlaza (TA) (S. Córdova). DT: J. Butrón.
