lunes, 28 de febrero de 2011
¿Umaña debe irse?
El diario Correo de Lambayeque ya puso la alerta. Diego Edison Umaña podría dejar al Juan Aurich. Según el matutino, la dirigencia roja está disconforme con su labor y evalúa su despido. Mientras, la hinchada roja está defraudada del colombiano.
El Ciclón, bajo el mando de Umaña, únicamente gustó en el partido ante Deportivo Cali. A partir de allí, las actuaciones del equipo aurichista han sido cada vez peor hasta tocar fondo con el pobrísimo 2-2 de ayer frente a CNI.
Ni el empate sin goles con la "U" sirvió para que Umaña se gane la confianza de los aficionados porque esa noche el Ciclón fue tan defensivo que si el hasta el mismo DT no se pone en el arco es porque el reglamento se lo impedía.
Las actuaciones de local de Aurich ante Unión Comercio y CNI dejan mucho qué desear. Vimos a un equipo carente de ideas, lento, preocupado más en defender que atacar y sobretodo con un juego cancino, obsoleto y con pocos recrusos ante la defensa contraria.
Umaña, sencillamente, está desactualizado. Y lo viene demostrando con el Ciclón. No conoce el medio peruano, tampoco y lo que es peor es evidente que ha entrado en conflicto con los equipistas de su plantel. Las ausencias en la escuadra titular de Gavilán y Balbuena así lo demuestran.
Umaña seguramente piensa que empatando todos los partidos es campeón y por eso está empecinado en mantener el cero. Pero el tiro le stá saliendo por la culata porque pasito a paso, el Ciclón va quedando reelegado en la tabla de posiciones.
La pregunta entonces es ¿Umaña debe irse? El estratega dirá que el equipo está invicto, a cuatro puntos del líder y otras excusas más, sin embargo el panorama que se cierne sobre el Aurich es desalentador.
Otra cosa: Umaña es un técnico enfermo. Sufrió un infarto dirigiendo en Colombia y sus facultades ya no son las mismas que antes o de la un hombre con el corazón sano. Y el campeonato peruano es sumamente exigente. La hinchada ya lo llenó de insultos el domingo. Eso, obviamente, resquebraja aún más su salud.
¿Qué hacer? ¿Buscar otro técnico? ¿Un lavado de cabeza de parte de la dirigencia? Aurich regaló dos puntos de oro ante CNI, viene jugando pésimo y no le agrada a nadie. Esa es la realidad. Y los directivos tendrán que poner las barbas en remojo antes que sea demasiado tarde.
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