Aurtich la vio negra

Con razón los dirigentes vistieron de negro al Juan Aurich, porque ya es cadáver.  Perdió 3-2 con Cantolao en el Callao y no lo salva nadie.
Aurich ya viste de luto porque está  muerto. No le pudo ganar al rival directo para salvar el descenso, no ofreció nada positivo y ni los jales que con tanta pompa presentaron los directivos, aportaron mucho para cambiar las cosas.

El equipo, en realidad,  la vio todas negras, como esa horrorosa casaquilla que lució, conmemorando el último lugar histórico que luce en la tabla.
Lo que es peor, el Ciclón sumó quince partidos sin ganar. Increíble,
Tienen razón los dirigentes para vestir así al Aurich, porque el Callao, el Ciclón la vio negra y perdió sin pena ni gloria dando un nuevo paso a la baja.
A los 8', González no llegó a un tiro libre peligroso de José Manzaneda, salvándose Aurich que se dejó estar en las marcas.

El Ciclón jugaba muy medroso, con demasiado temor.
Luego, a los 12', Elsar Rodas regaló un tiro libre, mandándola mansa a las manos del arquero Nicosia.
Al instante, Carmona la mandó demasiada alta.
Céliz a los 15', también la mandó a las nubes.
Cantolao rompió el empate a los 23', a través de Gerson Barreto.
Después, Valencia casi anota con un remate potente que controló Cisneros.
El ansiado em,pate llegó a los 30', con un jugadón de Buitrago y cuyo remate, tras dar en un contrario, descolocó a Nicosia.
Después, a los 34', Nicosia salvó un buen remate de Vílchez.

Los mejores momentos del Ciclón que, sin embargo, no supo concretar en goles.
Borges se pierde el segundo a los 38', rematando de lejos demasiado mordido y sin mejor dirección.
En el minuto 43, Araujo aprovechó un rebote en Cisneros para anotar a placer, poniendo arriba a los locales.
En el complemento, apenas a los 6', fueron expulsados el local Carmona y el panameño Buitrago por decirse la vela verde frente a las narices del árbitro.
El argentino Milton Céliz con un soberbio cabezazo, consiguió el empate aurichista a los 14'.

Elsar Rodas, a los 17', la manda a cualquier lado, malogrando una buena galopada del Ciclón que necesita ganar como sea para dejar la cola.
A los 24', Alvaro Medrano le cometió un penal innecesario a González.
José Manzaneda, afortunadamente, la mandó a las nubes, perdiendo la pena máxima.
Borges se pierde el tercero a los 27', cuando estaba bien perfilado en el cajón grande porteño.
Willy Rivas, víctima de la desesperación, manda un centro a cualquier lado, estropeando un buen avance del Ciclón, cuando Cantolao ya se encontraba desarmado en su retaguardia.

Paulo Albarracín, a los 41', tras un jugadón de González, se perdió el gol triunfal de Cantolao cuando, solito, sin marca, sin arquero, la mandó arriba. Un auténtico blooper.
Canela, en cambio, no perdonó a los 42', ante un Cisdneros, nuevamente, paradote en su línea, regalando todo su arco.
Una derrota más, quince partidos sin ganar y un equipo vestido de luto. Y tiene su razón de ser: el Ciclón ya es cadáver.
Dirigió mal Henry Gambetta.
CANTOLAO (3): Nicosia; Barreto (B. Canela), O. Contreras, J. Araujo y G. Carmona (TR); P. Albarracín (TA), F. González, Valencia (C. Cabello) y D. Ramírez (K. Paico); J. Manzaneda y Martín. DT: C. Silvestri.
AURICH (2): J. Cisneros; W. Rivas, K. Rodríguez (TA), Y. Vílchez y E. Rodas; J. Archimbaud (TA), J. Juárez (H. Hinostroza) y R. Buitrago (TR); A. Medrano, E. Borges (B. Montenegro) y M. Céliz. DT: C. Lovrincevich.