Gómez fue integrante de la época de oro de Juan Aurich, subcampeón nacional 1968 y jugó la Copa Libertadores de 1969.
En la escena, justamente, lo vemos entrevistado por Eduardo San Román después del partido ante Wanderers de Chile en el Estadio Nacional de Lima, por el torneo copero.
"Pipa" destacó siempre por su entrega, pundonor y guapeza en la cancha, sabiéndose ganar el respeto de los rivales. Se desempeñaba como marcapunta izquierdo y era suplente del "Perrito" Augusto Vílchez.
Era padre de Mario "Machito" Gómez, quien también destacó en Juan Aurich.
Gómez luego fue entrenador de Aurich en un torneo regional, pero no tuvo mayor fortuna. El apodo de "Pipa" se lo ganó por su tendencia a engordar.
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