La salida de Wilmar Valencia, culpable de esta horrorosa debacle de Juan Aurich, no solucionará los padecimientos del Ciclón. Si bien "Bam Bam" nos condenó a estar en la cola, a sufrir estrepitosas goleadas y convertir a nuestro orgulloso club en una auténtica payasada, persistirán estos jugadores que son discretos a más no poder y cualquier técnico que venga será difícil que los vuelva buenazos de la noche a la mañana. Y es que, sencillamente, todos son malos.
Y empezando con el arco, todo está mal. No es posible que a un arquero como Jesús Cisneros le metan veinte goles en tres partidos. Ni en un torneo de barrio se ve tremenda coladera. Es verdad que Cisneros tiene 40 años, sin embargo que lo dejan tan vapuleado es porque realmente es un portero malo, ciego y con manos de mantequilla.
Mazzetti o Borges no cambiarán nunca. Son troncazos y su presencia en Aurich ha sido realmente un lastre.
El Ciclón dejó ir a "Conan" Rojas y se quedó sin contención en la mediacancha. Juárez es un jugador tan discreto que en Argentina paraba cayéndose y por su culpa llegaron muchos goles. Archimbaud es un volante de Liga o Copa Perú y Quinteros como Sheput son no solo pechos fríos, sino que no tienen alma para ser caudillos y el "Pincel" hace rato que llegó a su techo y ya debe colgar los botines. En Aurich, simplemente, está dando pena.
Buitrago no puede cambiar, solito, todo el equipo. Si no tiene jugadores que valgan la pena, que al menos se esfuercen, que tengan aunque sea un veinte por ciento de calidad, no hará milagros ni cambiará el rumbo. Perleche ni Rodas dan la talla como laterales y Yordi Vílchez necesita, en la defensa, un jugador de mayor peso y experiencia pues Rivas aún está demasiado verde.
Arrieta tampoco es gran cosa y menos lo es Campodónico. Y lo que es peor, si los titulares son malos, los suplentes son recontramalos.
Entonces, ¿qué hará el nuevo técnico del Ciclón? Nada, el plantel armado por César Alva es mediocre desde el portero hasta la banca.
Y entonces concluimos que gran responsable de esta debacle es César Alva, presidente del club.
Esto, sin embargo, no debería sorprender. Desde que Alva tomó el club, los fracasos se han sumado uno tras otro. De ser protagonista, Aurich pasó a ser un equipo de media tabla y en las dos últimas temporadas estuvo comprometido con la baja. Y ahora está colero y es candidato de fuerza para irse al descenso.
El mismo Alva debería aceptar que a su mando Aurich está mal y marcharse junto a Valencia y dar ocasión a dirigentes que sean ganadores, que quieran al club, realmente.
Desde que Alva manchó de negro la gloriosa insignia aurichista, condenó al Ciclón a la debacle que ahora padecemos todos los hinchas rojos. Desde allí se notó que no tenía visión ni carácter ni manejo para estar al frente de una institución que fue campeón nacional, con todas las de la ley, en 2011.
¿Qué hacer? Aurich necesita 22 jugadores buenos, para empezar. Además, una dirigencia que quiera al club, que sepa gerenciar al Ciclón, que no se deje manejar por empresarios y poner freno a intereses de terceros que ponen, como si nada, a su entrenador y jugadores en el club.
Aurich vive un infierno, está último, a su arquero, en tres partidos, le han hecho 20 goles, es el peor equipo del Descentralizado y candidato de fuerza para irse a la baja. ¿Hasta cuándo vamos a seguir soportando más humillaciones? Ni cuando bajamos a la Segunda División de Chiclayo se vivió esta pesadilla de humillaciones y vejámenes.
Todos los que queremos al Aurich advertimos que el equipo que armaban Alva y Valencia era malazo, pero hicieron oídos sordos. Y allí están las consecuencias.
Por eso que junto a "Bam Bam" que se vaya Alva y Edwin Oviedo, si sigue siendo dueño del club, nombre a un mejor dirigente o en todo caso poner a licitación al club y entren empresarios que inviertan y saquen al Ciclón del sótano donde se encuentra.
Kike Ciclón
TOTALMETE DE ACUERDO CON TODO TU COMENTARIO AMIGO!!!
ResponderEliminarEl Campeon 2011 debe levantar y ahora lavarse desde la cabeza...Alva eres el unico culpable
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