La pregunta es ¿Aurich mereció mejor suerte? ¿Hizo méritos para al menos un empate? La verdad que no. El Ciclón estuvo apagado pese a que dominó en el primer tiempo. Porque no fue efectivo ni contundente y falló en las definiciones. Un equipo con pretensiones de salir campeón, no puede ser tan irresoluto en el área. Por eso, no se logró un mejor resultado frente a los aliancistas.
Morales estuvo bien, sobretodo en el mano a mano con Claudio Velázquez. En el gol estuvo adelantado aunque, claro, ese zapatazo de Neyra era inatajable para cualquiera.
Vásquez y Rivas demostraron poco. Es obvio que no dan talla en el Ciclón y se extrañó a gritos a Guizasola. Araujo lució dubitativo y falso en los cruces mientras Lalopú ofreció mucho entusiasmo y fue lo mejor del bloque defensivo.
Cevasco se lesionó y su salida complicó las cosas. Espejo hizo lo que pudo, que fue poco, mientras Ciciliano nuevamente estuvo apagado, sin dar buenos pases, haciendo naufragar al equipo. Tejada estuvo bien marcado mientras Chiroque y Ascoy aportaron poquísimo en la avanzada.
Mendoza, a su vez, estuvo imperfecto, contagiado de la tarde apagada de Ciciliano, mientras Manco se dejó vencer por las silbatinas. Zúñiga no apor`tó nada.
Por eso la pregunta cae por sí sola: ¿merecimos mejor suerte? Creo que no.
Ferreñafe
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