¿Qué pasa con Aurich? Sencillo, no hay puntería. Ante Melgar las ocasiones perdidas superaron, fácil, la decena de ocasiones. El equipo dominó, hilvanó muchas jugadas de peligro pero siempre los remates se fueron a las tribunas, a las manos del arquero rival o hubo una de más. Con un panorama así, es muy difícil ganar partidos y es lo que le está pasando al Ciclón.
No hay reproches a la entrega, la actitud y las ganas del equipo. Ante Melgar, el Ciclón propuso y buscó la victoria. Se jugó un partidazo pero no supo definir y de eso aprovecharon los mistianos para empatar.
Y esa resta de puntos por no ganar, puede pasarle factura al Ciclón al final de la temporada y dejarnos sin el sueño preciado de ser bicampeones.
Penny estuvo formidable en los palos aurichistas. Salvó varios goles cantados y fue lo mejor del elenco nuestro.
Max Barrios cumplió de acuerdo de sus posibilidades y no defraudó. Igual Benavides que aportó mucho entusiasmo y tampoco arrugó. Guadalupe se mostró bien en la defensa y aportó su experiencia. Quina hizo poco.
Molina, Ortiz e Inolopú cumplieron muy bien en la contención, frenando los ataques contrarios mientras que Israel Kahn sobresalió como motor aurichista. Marcó el tanto rojo y fue uno de los mejores de la cancha. Cada día está mejor.
Mauricio Montes buscó con mucho afán anotar pero a diosa fortuna no estuvo de su lado.
Manuel Ugaz ayudó en la marca en los minutos finales del cotejo mientras Luis Trujillo ingresó muy animoso generando ocasiones de peligro en el área contraria. Luis Tejada jugó muy poquito.
Un empate que no es malo, pero que tampoco es bueno. Basta y sobra para graficar el 1-1 contra Melgar.
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