en la retaguardia, pródigo en sus salidas, prolijo en la marca y efectivo en las oportunidades que se le presentó.
Es cierto que si Almirón aprovechaba mejor ese blooper de Erick Delgado, otra era la historia, sin embargo, la salvada de Jeickson Reyes forma parte de ese rendimiento aurichista que no sabe bajar los brazos y las pelea todas. Por eso reaccionó a tiempo, porque este Ciclón versión Mosquera es empeñoso y febril.
El golazo de Vílchez y más antes el oportunismo de Sánchez, firman un Aurich que busca el gol y que ya dejó atrás las excesivas lateralizaciones de Bakero. Ahora es vertical y lo que es mejor ambicioso.
El triunfo ante Gálvez se gesta gracias a un principio básico en Aurich: ser sólido y efectivo a la vez. Una buena defensa, manteniendo el cero, garantiza la oportunidad de ganar. Así se hizo ante a "U" y ahora ante Gálvez.
Erick Delgado estuvo bien, excepto su error en un despeje con la cabeza tras una mala devolución de Reyes. Salvó dos goles cantados ante Sergio Almirón.
Rodrigo Cuba estuvo muy animado en sus desbordes aunque poco efectivo, pero siempre llevó peligro al área rival. Mejor rendimiento tuvo Reyes, impecable en la marca y generoso prodigando centros al área contraria.
Balbuena y Minaya cumplieron con mucho acierto en la zaga central mientras que Rojas fue un gigante en la contención volviéndose a convertir en el paredón rojo del equipo. Vílchez firmó su buena labor con su golazo, mientras que Sánchez estuvo más ganoso que otras veces, marcando un tanto. Viza en cambio hizo muy poco y Kahn no fue el mismo de las fechas anteriores.
Ovelar estuvo muy marcado mientras que Arismendi para variar, fue una nulidad total.Carranza ayudó en la marca y Noronha aportó lo suyo aunque careció de mayores oportunidades en el ataque.
Aurich ganó bien. Fue acertado y sólido. Bases que gestan los triunfos.
Ferreñafe
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