Víctor Rivera tiene que irse. De inmediato. Aurich es un equipo sin brújula, campeón empatando, jugando mal, sin variantes tácticas, con la filosofía del pelotazo. Es decir juega a lo Bakero.
Rivera ha demostrado poca muñeca en el manejo del equipo. Le impusieron un equipo, los jales, los panameños como Addles, jugar sin una banca apropiada y que le vendan jugadores. En otros palabras no se preocupó por nada y estas son las consecuencias: estamos entre los últimos.
Lo peor es que Rivera y los dirigentes se ufanan que el equipo juega bien. Pero ¿qué hacemos que juegue bien Aurich si va estar luchando la baja, no va a ningún torneo internacional y es el hazmerreír del campeonato?
En el fútbol los resultados mandan y Aurich, con tantos empates, no suma den forma apropiada y por ello está abajo, sin chance para el título y pensando en un milagro para ir a la Sudamericana.
Olascuaga, Cedrón, Addles, Barrow, Takeuchi no son jales, sino relleno y por ello Aurich solo depende de Luis tejada y Ricardo Buitrago. Y un equipo no lo hacen dos o tres jugadores si sumamos al buen Yordi Vílchez o Alfredo Rojas. El resto es silencio.
El empate ante Alianza Atlético desnudó todas las deficiencias tácticas de Aurich: pelotazo, ataques sin sentido, remates a como salga, un once sin pararse bien en la cancha, una defensa que hace agua y un arquero que es puro nervios.
La campaña de Aurich es malísima. El espejismo del comienzo fue eso: una ilusión porque los otros equipos llámese Alianza, "U", Cristal o Melgar recién se armaban o en el caso de los characatos, tenía la Libertadores encima. Y por ello que ahora, a mitad de año, nos han estirado una ventaja cósmica en la punta.
Claro, matemáticamente hay posibilidades para salir campeón, ganando todos los partidos pero ese tipo de milagros se consiguen con un técnico ganador no con un estratega como Rivera que su táctica es decirle a Buitrago "patea fuerte que el viento está a nuestro favor". ¿Eso es entrenador?
Aurich requiere refuerzos urgentes. Un buen arquero, dos defensas de calidad atrás, un seis todo terreno, un nexo entre volante y ataque y dos buenos delanteros, es decir casi un equipo completo sumados Tejada y Buitrago. Increíble.
Los hermanos Alva, al frente del equipo, han hecho una labor deplorable, dejando al Ciclón a la deriva y deben irse cuanto antes.
Aún se está a tiempo de enmendar la plana. Reforzar el equipo en forma conveniente, que si Rivera se queda, reclame por mejor banca y comience a parar de mejor forma sus equipos y deje de lado la filosofía del pelotazo.
De otra forma, señores, Aurich se va a la baja.
Ferreñafe
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