Así da gusto irse a dormir, con la sonrisa a flor de labios, alegre, con el corazón inflado de orgullo por el Ciclón. Aurich jugando un gran partido se llevó el triunfo ante CNI y demostró que es un equipo capaz de grandes hazañas.
El Ciclón lo tuvo todo ante los loretanos. Demostró poder de ataque, jugó con prolijidad táctica, hizo bien las cosas y fue ampliamente superior a CNI. Por eso, el 1-0 es justificado y motiva mucho pensando en alcanzar la instancia final del campeonato.
Diego Penny estuvo bien en el arco. Salvó varias pelotas venenosas de los charapas y lució seguro y con aplomo en sus intervenciones.
Guizasola provocó siempre peligro al arco rival. Con su presencia el equipo rojo ha ganado mucho poder ofensivo.
Guadalupe y Balbuena nuevamente demostraron que son los mejores centrales del capeonato. Impecables en sus intervenciones. En cambio Quina no lució. No hizo muchas corridas.
Uribe y Rojas estuvieron acertados en la contención más Rojitas que se ha convertido en un baluarte en el equipo chiclayano.
Roberto Merino sigue en deuda con la hinchada. Ante CNI sólo lució chispazos pero demasiado intermitentes. Noronha lució únicamente empeñoso.
Ascoy hizo lo que pudo ante una pegajosa marca rival mientras que Zúñiga marcó el gol que dio el triunfo al Ciclón y fue una constante pesadilla para el área rival.
Cueto, Alvarez y Sheput aportaron poco al equipo.
En suma, un triunfo importante, en una ciudad siemre complicada y que demuestra que el Ciclón sopla... y sopa con fuerza.
Kike Ciclón
Fotos Prensa Aurich
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