Qué bien jugó Aurich. Con orden, con garra, con muchos deseos. Repitió sus excelentes actuaciones del año pasado que se coronó campeón nacional. Todos nos fuimos felices con la buena labor del Ciclón frente a Inter.
Ya estaríamos clasificados, decían los hinchas al dejar el estadio aguirreño. Y tienen razón, pero la Conmebol nos despojó de una clasificación justa y legal. Hasta el mismo Inter reconoció su error al no ubicar más a Oscar en los partidos de la Copa.
Lamentablemente la Conmebol volvió a mostrar su interés únicamente en los equipos grandes, pisoteando los derechos de los equipos chicos.
Diego Penny estuvo excelente en la puerta aurichista. Sereno, seguro, dueño de su área. Tuvo varias atajadas estupendas.
Diego Minaya y Nelinho Quina respondieron bien aunque no se proyectaron mucho. En sus zonas impusieron respeto.
Guadalupe estuvo muy bien en su triunfal vuelta a la zaga aurichista mientras Fleitas, como siempre, mostró inseguridad.
Molina se fue rápido a los camarines y Rojas cumplió en forma acertada en la marca. Cueto fue el mejor de la cancha en tanto que Chiroque estuvo muy empeñoso, haciendo de las suyas ante los recios defensores rivales.
Tejada nos regaló un golazo a su estilo, como en sus viejos tiempos, mientras Zúñiga únicamente estuvo ganoso.
Valencia también estuvo bastante bien, llevando peligro al arco contrario y ayudando en la marcha mientras Kahn aportó poco.
Un triunfo muy importante para el ánimo del equipo y sobre todo, para ponerle broche de oro a nuestra intervención copera.
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