Una tarde perfecta

Juan Aurich estuvo perfecto. Incluso cuando quedó con diez hombres, el Ciclón lució acertado en todas sus líenas. Jugó con orden, con mucha predisposición y critierio, incluso peleando todas las pelotas.
La victoria por la mínima diferencia es justa, porque Cristal fue un equipo duro, que exageró en el juego fuerte y que siempre propuso, sin embargo todos los intentos celestes se estrellaron siempre con la férrea voluntad aurichista.
Diego Penny fue una de las figuras de la cancha. Salvó varias pelotas difíciles y le dio tranquilidad al equipo.
Trujillo lució muy voluntarioso al igual que Quina, pero no pudieron aportar mucho porque Cristal buscó siempre desbordar por los laterales. Fleitas estuvo bastante nervioso e impreciso mientras que Diego Minaya fue un gigante en la defensa. Se

jugó el mejor partido de su vida y fue una muralla para los delanteros contrarios.
Rojas también brilló con luz propia en la cancha y estuvo excelente en la contención. Valencia no fue el de otras oportunidades mientras que Guevara exageró en el juego de lujo. Israel Kahn, a su vez, fue lo mejor de la cancha y redondeó su gran labor con el golazo que significó, a la postre, el tanto triunfal aurichista.
Chiroque estuvo muy empeñoso y provocó serios sofocones en la retaguardia rival en tanto y Tejada fue expulsado injustamente.
Ortiz ayudó en la marcha mientras que Cueto entró impetuoso pero le quedó muy corto el tiempo y Contreras hizo poquísimo.
Aurich se jugó un partidazo y el triunfo es meritorio para el Ciclón.

Ferreñafe
Fotos Prensa Aurich