Con miras al partido con Juan Aurich, Tigres, que llegó al Perú con un plantel conformado por apenas 16 jugadores, reconoció la noche del martes el campo del Elías Aguirre de Chiclayo. Y en pleno entrenamiento, sucedió un hecho curioso.
Entre los trabajos, Tigres realizó una ‘pichanga’, pero como el plantel no está entero, el técnico Ricardo Ferreti tuvo que echar mano de los utileros del club, conocidos como ‘Pancho’ y Carlos, para completar el trabajo requerido.
Esta decisión causó la risa de algunos directivos de Tigres que se encontraban en el estadio de Juan Aurich e incluso del mismo presidente, Alejandro Rodríguez, quien también se encontraba en el estadio.
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