sábado, 27 de febrero de 2010

Manco quiere quedarse

El viejo Reimond Manco tenía 16 y aceptó disfrazarse de rey del mundo. Eran los días del Sudamericano Sub 17 y la joyita de los “jotitas” aceptó posar para un diario de Lima con una corona de papel metálico y un cetro de tubo de plástico. Esa foto iba a ser una metáfora de su vida: el chico que deslumbra y se deja deslumbrar. Pero eso fue hace tiempo.
“Reimond es el señor de 20 años más maduro que he conocido”, dice de él Edwin Oviedo, el presidente de Juan Aurich, su actual club. El nuevo Manco cumplirá esa edad en agosto y al otro lado del teléfono me dice que será mejor que ningún fotógrafo lo persiga, que ninguna cámara lo enfoque.
Esa noche, posiblemente, estará en su casa de Chiclayo con la familia. O en alguna casa, pero con la familia.
El hombre que recuperó la gambeta para el fútbol peruano hará una finta y nadie podrá alcanzarlo: “Lo mío, desde ahora y para siempre, es la página de deportes. Se lo he jurado a mi mamá y a mi esposa”, dice. Exiliado en Chiclayo, la figura del Sudamericano Sub 17 para la Conmebol en el 2007 habla con la paciencia de un hombre viejo. Y añade, casi en tono profético, una frase que define sus días en el norte:
—He vuelto a ser un jugador de fútbol.
Santa Victoria es una urbanización residencial a cinco minutos del centro de Chiclayo. Un taxista me dice que es el barrio de los oficiales de la policía. Es una zona tranquila. El lugar perfecto para que un futbolista abrumado por los periodistas y curiosos descanse. Allí vive Reimond Manco hoy, junto con su mamá y su esposa. “Yyyy soy feliz, sí”, contesta el hombre que le costó casi US$2 millones al PSV de Holanda en el 2008. A veces, la policía es el mejor disuasivo para los reporteros que no quieren respetar su intimidad. Se lo pregunto a Manco y él solo sonríe. Es la misma risa con la que antes, cuando era el viejo Reimond Manco, aceptaba salir en la televisión nacional untándole mantequilla al pan en su querida casa de Lurín.
¿Qué es lo mejor de vivir en Chiclayo y no en Holanda?
Que la gente me respeta y me quiere. Estoy agradecido para siempre por la manera en la que me acogieron. Me siento espectacular. Y la directiva, empezando por el presidente, todas son personas diez puntos.
¿Y lo peor?
Como en cualquier ciudad pasan cosas raras, tú sabes. Ahora ando sin carro, por ejemplo. El otro día mi mamá se subió a un Tico y por querer robarle unos tipos le arañaron la cara. Quería buscarlos por toda la ciudad, pero me dije: “Naah, ya fue”. Estoy tranquilazo, no te digo.
TRANQUILIDAD
Manco no podría haber elegido mejor para este nuevo capítulo: Juan Aurich entrena a diario en el colegio Los Algarrobos, y los únicos vecinos mirones en realidad son solo testigos. A cien metros del campo se levanta el cementerio Jardines de la Paz, en el km 3,5 de la carretera a Pimentel.
—Estoy tranquilazo, no te digo.
Reimond Manco debutó en Primera el 8 de abril del 2007 frente al Alianza Atlético de Sullana. Jugó cuatro minutos. Hizo un caño. El Comando Sur lo aplaudió. Era la estrella, pero se fue estrellando. Casi un año después viajó a Holanda para jugar en PSV Eindhoven, donde Jefferson Farfán, su amigo, es crack y no rindió. Lo prestaron al Willem II unos días después de su matrimonio con la modelo Fiorella Vento. Solo había jugado cinco partidos, incluida la Champions League. Era el peor regalo de bodas del mundo. Pero de eso casi no habla. Solo aclara que es feliz. Acaso Chiclayo le haya servido para construir eso que precisamente necesitan los recién casados.
El pasado 29 de enero se cumplió un año desde que le dijo que sí a la señora Manco, la chica linda de Lima Teens. Un jugador del plantel me dijo que ha escuchado que le cocina y todo. Hoy es su secreto mejor guardado. “Yo estoy más centrado, más maduro. Voy de mi casa a entrenar, de entrenar a mi casa. Me gusta pasar un poco desapercibido”. El aliancista Manco solo quiere que respeten su intimidad.
¿Es cierto que ahora tienes dos entrenadoras particulares, tu mamá y tu esposa?
Pues es algo así, algo así, ja.
Edwin Oviedo es el nuevo zar exitoso del fútbol peruano. Dirige y gobierna al Aurich desde la soledad de no contar con auspiciador distinto al grupo Oviedo, el imperio azucarero más grande del norte del Perú. Es un hombre sencillo que ha invertido US$3 millones para incorporar al “Ciclón” a la órbita internacional, pero viaja en taxi Tico sin mayor roche. Él dice, sentado en su oficina-búnker, que Manco convenció de tal forma al técnico Luis Fernando Suárez que ahora es el propio entrenador colombiano quien ha sugerido extender el préstamo del mediapunta más allá de junio. Suárez, que en un principio no lo pidió, ahora no quiere dejarlo ir.
¿Y tú quieres quedarte, Reimond?
Me gustaría, estoy encantado. Es más, si tú me preguntas ahora, te digo que sí. No sería justo para nadie que me vaya sin el objetivo cumplido, que es salir campeón. Y tampoco que me quede sin festejar.
¿Vas a aceptar ganar lo mismo?
Ja, ja, ja. No puesss, eso habrá que verlo. Yo he resignado casi la mitad de lo que ganaba en Holanda por venir aquí. Y ha sido una decisión importantísima en mi vida. Que se pongan de acuerdo los dirigentes y listo.
¿También postularías a Suárez a la selección, pese a que en un principio no aceptó tu fichaje en Aurich?
El profesor es un técnico exitoso que ha dirigido en un Mundial. Con eso te digo todo. Lo de la selección es un tema aparte aunque no te voy a negar que ya pienso en la Copa América. Aunque si me pides mi opinión, él debería ser el técnico de Perú.
El viejo Reimond Manco es ahora una postal del recuerdo. El hombre que alguna vez fue disfrazado de rey ahora solo quiere jugar al fútbol, pensar en fútbol. No es cierto que estaba acabado. Mentira. A los 20, el imperio de Manco recién está por empezar.
LESIÓN
Manco sí jugará contra AlianzaEl susto fue grande, pero al final no fue para tanto: la lesión sufrida por Reimond Manco no le impedirá estar con su equipo el 10 de marzo en el decisivo encuentro por la Copa Libertadores ante Alianza Lima. El futbolista fue sometido a una resonancia magnética y, afortunadamente, solo tendrá que descansar durante una semana debido a una inflamación en la rodilla. Manco ha dicho que tiene muchas ganas de jugar contra su ex equipo.
El Comercio

No hay comentarios:

Publicar un comentario