El español José Mari Bakero, figura referencial de Barcelona durante la década del 90 y hoy entrenador de Juan Aurich, de Perú, aseguró que Lionel Messi "es el mejor futbolista" que vio en su vida, al tiempo que advirtió que Diego Maradona "no dejó huella" en el club catalán.
"Messi es el mejor futbolista que vi en mi vida. A los 12 años ya hacía cosas que después repitió en primera, como por ejemplo aquel golazo al Getafe que se pareció tanto al de Maradona a Inglaterra en el mundial de México", expresó Bakero en una entrevista con el programa radial Deportivo Télam.
"En cambio Maradona no dejó huella en el Barcelona. El no hizo las grandes cosas que después sí realizó el brasileño Romario, que es muy querido en el club. Tuve la suerte de verlo de cerca, ya que compartimos equipo, y era un enorme jugador", definió.
Al analizar al Barcelona de estos tiempos, el ex volante ofensivo ("jugaba siempre a un toque para disimular que no podía gambetear a nadie", admitió) sostuvo que el conjunto hoy dirigido por Jordi Roura "nunca estuvo en crisis como se dijo por allí".
"De hecho, los primeros 14 minutos del partido de ayer frente a Milan (4-0 por octavos de final de Liga de Campeones) fueron los mejor jugados por este equipo en la historia", aseveró.
"Y el mediocampo que tiene hoy el `Barsa`, con Xavi, Iniesta, Busquets y Messi tirándose atrás para conformar el circuito de juego, también es el mejor de la historia y seguramente será recordado así dentro de 100 años", estableció.
Bakero jugó en la primera división de Barcelona entre 1988 y 1997, viene de trabajar tres años en el fútbol polaco "porque en España cuesta mucho dirigir" y contó que el "primer gol que hizo Messi contra Milan" lo gritó "como un hincha más" en su cuarto de hotel en Perú, a donde llegó hace tres meses "con un contrato por dos años. Estoy entusiasmado porque jugaremos Copa Sudamericana".
"El fútbol de ahora no se puede comparar con el de mi época, porque los jugadores en la actualidad son catedráticos del juego, mientras que nosotros no pasábamos de la primaria", ejemplificó con una metáfora muy particular.
"Como futbolistas nosotros obedecíamos a ciegas al entrenador y nunca preguntábamos nada. Ahora es distinto, porque los jugadores están mejor preparados e interrogan sobre todo. Es como en la vida misma, que nuestros hijos nos cuestionan y no aceptan órdenes sin antes analizarlas y debatirlas", puntualizó.
Quien fuera integrante del seleccionado español en los mundiales de Italia 1990 y Estados Unidos 1994, aseguró que un "mal entrenador puede destrozar un equipo", pero destacó entre sus preferidos "a José Mourinho. Compartimos ayudantía de campo con él cuando el holandés Louis Van Gaal era el técnico de Barcelona".
"De Mourinho admiro su capacidad de adaptación, ya que él es portugués pero triunfó en Inglaterra, Italia y España, lo que habla de su excelencia para formar grupos y mejorar los equipos desde lo individual. Después, los pleitos y su forma de ser a veces lo hacen durar poco en los clubes por los que pasa", apreció.
"Y de los argentinos seguí mucho a Marcelo Bielsa porque me une una gran identificación con Athletic de Bilbao. Hizo un trabajo brillante al principio y ahora padece las salidas de Javi Martínez y Llorente", describió.
En cuanto a Diego Simeone, resaltó que llegó "al Atlético de Madrid en el momento oportuno. Es el sitio ideal para él".
"Y en cuanto al Barcelona, creo que lo que produjo Josep Guardiola se puede equiparar a lo hecho hace más de dos décadas por Johan Cruyff, que desde la impronta holandesa revolucionó futbolísticamente al equipo", puntualizó.
"Por eso estoy firmemente convencido que a pesar de los últimos marcadores desfavorables, en un mano a mano hoy Barcelona es superior a Real Madrid", enfatizó.
Finalmente Bakero, de 50 años, afirmó que ahora "los mundiales con más importantes que la Eurocopa para los europeos.
Hace unos años era al revés".
"Alemania, Francia, Inglaterra y la propia España son más reconocidas por sus logros mundialistas que por sus conquistas europeas", precisó.
"Y esta generación de futbolistas españoles nos llevó a lo más alto, pero puso la vara tan arriba que ahora habrá que ver si existe el recambio idóneo como para mantenerse en ese nivel a futuro. Lo que tenemos a favor es que nuestro seleccionado perdió el miedo al fracaso y va por lo máximo en todo lo que compite", contempló.
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