Peor, imposible

Aurich no pudo con Itagüi. No hubo milagro. Por el contrario, los colombianos volvieron a ganar, ratificando su superioridad y demostrando que el Ciclón cumple su peor temporada en los últimos seis años.

El Ciclón volvió a demostrar pobreza técnica, jugando sin idea, "a la prepo", sin orden y evidenciando que tiene un plantel limitado y un técnico incapaz. Jugar peor, es imposible. El 3-2 con que perdimos, finalmente resultó siendo una bendición para el pobrísimo nivel que muestra el rojo en la cancha.

Decir que Aurich juega bien, tiene toque, presiona y todo lo hace a velocidad  es absurdo, es tratar de justificar el papelón y ponerle un curita al cáncer que significa Bakero  para el orgulloso Ciclón. El plantel

rojo es malo en toda la expresión de la palabra, no tiene idea futbolística y ni siquiera tiene ganas para cambiar las cosas. Sus integrantes  "pichanguean", únicamente, burlándose de la hinchada.

Itagüi la hizo fácil no porque es un equipazo y tiene una maravilla de oncena, sino que no tuvo rival. El Ciclón fue una sombra, y no solo por Cristian Ramos, sino por el resto de sus compañeros como Sánchez, Atoche, Arismendi, el propio Céspedes desdibujado al cien por ciento, que no le ponen alma para revertir el mal momento rojo.

Delgado falló en dos de los goles del Itagüi y no llega ni al 10 por ciento de lo que fue en la temporada 2009. Justifica el por qué siendo campeón, Cristal lo dejó ir.

Minaya le puso muchas ganas pero demostró demasiadas limitaciones en las proyecciones mientras que Céspedes, como se ha dicho, está de mal en peor y lo que empezó deslumbrando, ahora da pena.

Ramos jugó pésimo, una puerta abierta para Itagüi, mientras que Balbuena mejoró en relación a sus últimos partidos lo que no fue suficiente.

Rojas también le puso ganas pero tampoco alcanzó mientras que Atoche ratificóque su presencia está demás en el plantel 2013.

Merino jugó absolutamente solo y Sánchez jamás se entendió con él. "Wally" fue el peor de la cancha al igual que Arismendi que no demuestra nada de nada. Ovelar al menos anotó un gol y cumplió.

Viza ingresó impetuoso marcando un tanto mientras que Estrada hizo lo que pudo mientras Pacheco fue un cero a la izquierda.

Qué pena todo lo que pasa con Aurich. De ser tan elogiados en el pasado por el mundo del fútbol, ahora nuestro querido equipo es el hazmerreír de todos.

Kike Ciclón