¿Qué pasó, Ciclón?

Esperábamos más del equipo. Pensábamos que podía dar mucho, que era superior a Estudiantes de La Plata, pero a la hora de la verdad, Aurich no fue ni la sombra de esa asombrosa actuación ante Alianza Lima.

¿Qué pasó? La responsabilidad pesó demasiado. Las ansias de ganar aplomaron a los muchachos mientras Estudiantes hizo lo que mejor sabe hacer, tener la pelota y jugar al contragolpe.

Otra vez la defensa volvió a ser el punto más bajo de Aurich. Un pésimo Jorge Araujo y un carente de ideas como Martín Vásquez, no hicieron más que facilitar el trabajo argentino mientras que Reimond Manco pecó de individualista.

Pedro Ascoy estuvo mal y Ciciliano no hilvanó bien las jugadas. Los argentinos taparon a Roberto Guizasola en tanto que Luis Tejada estuvo aislado en el ataque. La Rosa y Espejo cumplieron en la medida de sus posibilidades y Alvarez, al final, contagiado de la inoperancia del equipo, fue expulsado.

Los cambios tampoco dieron resultado. Chiroque no aportó nada de nada mientras que Zúñiga entró cuando ya era tarde. Lo de Balta fue para cubrir el vacío dejado por Alvarez.

Morales incluso estuvo adelantado en el golazo de Braña que aprovechó el viento para clavarla exacta en el arco de los rojos.

La verdad que Aurich tuvo, sencillamente, una noche para olvidar.

Kike Ciclón