Hoy a las 3 de la tarde, Aurich se juega el todo o nada ante Cristal en el estadio San Martín. Sin embargo, para los aurichistas, la jornada divide el corazón en dos, porque, caprichos del destino, debemos hacerle barra al Ciclón y al José Gálvez también.
Hoy somos Aurich y somos Gálvez. El Ciclón debe ganar sí o sí a Cristal y por otra parte, estamos obligados a unir el aliento para que los chimbotanos derroten a Alianza Lima. De lo contrario, nuestros sueños de vuelta olímpica, definitivamente, habrán acabado en pesadilla.
Aurich es más que Cristal. Los celestes han cumplido una de las perores campañas de sus últimos años y es un equipo débil y sin convicción. El Ciclón para ganar, no debe caer en la desesperación ni la angustia y hacer las cosas bien, teniendo la pelota e hilvanando ataques constantes con la magia de Mayer Candelo.
El DT Luis Fernando Suárez hace bien ubicando a Martín Arzuaga con Pedro Ascoy en el ataque. Lamentablemente, el colombiano reparó muy tarde que su fórmula de ataque era sin José Moreno, una nulidad en cuanto partido jugó y dejó al equipo supeditado a rezarle a la Cruz de Motupe para ser campeón.
También es alentadora la vuelta del habilidoso William Chiroque que tanta falta nos hizo en esta pésima liguilla para los rojos.
En el fútbol no hay lógica y hay milagros. Aurich aún puede salir campéón. Hoy se debe ganar a Cristal y esperar con fe que Gálvez supere a Alianza Lima. Si habrán incentivos o no, se sabrá después. Ahora, lo que debemos hacer todos los aurichistas es alentar a nuestro querido Ciclón y hacer fuerza por el Gálvez. No hay otra.
La alineación de Suárez sería con Delgado; Guizasola, Alvarez, Guadalupe y Gómez; Espejo, La Rosa, Candelo y Chiroque; Arzuaga y Ascoy.
No hay comentarios:
Publicar un comentario